Todo aquel que desconozca la faceta artística del actor Jordi Mollà tiene una cita imprescindible en La Fábrica de Hielo donde, desde ayer y hasta finales del mes de agosto, se podrán ver de un total de 17 obras llenas de color e inspiradas en la naturaleza, las flores y la vegetación típica marbellí, que han cautivado al intérprete catalán.
Realizadas con una técnica propia, sus cuadros reflejan un arte abstracto tan personal como revelador siendo, además, una forma de expresión del universo que rodea a Mollà y que le ha servido para triunfar alrededor de todo el mundo.
En esta ocasión, el artista aterriza con su arte en uno de los espacios más cautivadores y especiales de Marbella, La Fábrica de Hielo, un espléndido lugar de más de 1000m2 en el que conviven objetos de decoración, piezas únicas de interiorismo o antigüedades. Sin duda, el sitio perfecto para acoger el arte de uno de los pintores con mayor valor y reconocimiento dentro y fuera de nuestro país.
La velada, a la que han acudido numerosos amigos de familia y personas reconocidas de Marbella, entre ellas la concejala de cultura del Ayuntamiento, ha sido amenizada con música en vivo y con delicioso aperitivo ofrecido por Terralda, la firma de Alda & Terry que, junto con Rosauro Varo, realizan un servicio de catering especializado en bodas y eventos, siempre con el cuidado, la calidad y la excelencia como premisas y que los ha llevado a situarse como una de las empresas de catering de referencia no solo en la ciudad malagueña, sino en todo el país.